Consecuencias de comer rápido

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Consecuencias de comer rápido

Enumeremos algunas de sus consecuencias

¿Comer rápido engorda?

Las prisas se han transformado en algo tan frecuente que no nos damos cuenta del mal que puede llegar a hacernos. Como no puede ser de otra forma, el tema de el alimento tampoco se queda al lado. Y el ademán tan frecuente de comer veloz (en diez minutos) puede conllevarnos problemas médicos crónicos y eso sin contar la mengua en calidad de vida.

Contemos ciertas de sus consecuencias

Comer veloz significa entrar en una activa de agobio que, en último término, nos puede llevar a una muerte prematura por un sinfín de enfermedades. Nuestro organismo está programado desde temporada ancestral para un ritual en torno a el alimento. Si se rompe, empiezan los inconvenientes.
Hay que masticar todos y cada uno de los comestibles despacio. Con este fácil ademán asistimos a nuestro cuerpo a metabolizar el alimento apropiadamente. Y es de esta forma pues se marcha produciendo saliva cuyas enzimas actúan en sinergia con los ácidos digestibles.
Además de esto, si no masticamos apropiadamente, el estómago precisa una mayor cantidad de ácidos para romper esos pedazos. En consecuencia, las posibilidades de que se generen reflujo, ardor y, en último término, úlceras aumentan.
El comer veloz implica asimismo que nos abalanzamos sobre las viandas abriendo desmedidamente la boca. Si bien semeja una tontería, el estómago se llena de gases con molestas consecuencias.

¿Comer veloz engorda?

Sí. Y es que una comida que se hace en cinco o diez minutos, sencillamente, engorda. Y, ¿por qué razón? El estómago, conforme una investigación llevada en la Universidad de la ciudad de Atenas, tiene unas enzimas que van informando al cerebro de la sensación de saciedad. Para esto se precisa un tiempo.

Esto es, al primer mordisco el estómago da una orden, hay que aguardar un tiempo; para el segundo otra, tarda asimismo hasta llegar el cerebro y de este modo consecutivamente. Si nos tragamos el alimento en 3 mordiscos, nuestro organismo no se ha enterado de ese acto y proseguimos con la sensación de apetito y, por ende, comiendo más.

Comida veloz = comida preparada = comida morralla o bien basura

Mas el ademán de comer veloz no solo engorda por lo expuesto previamente, asimismo pues recurrimos a el alimento preparada. Si no hay tiempo para sentarse a la mesa para saborear un guiso con nuestros seres queridos, menos tendremos para prepararlo con esfuerzo. Y ya sabemos que este género de platos preparados solo tienen un montón de calorías vacías que nada aportan al organismo. En verdad, en cualquier pirámide alimenticia, se halla en último sitio.

Además de esto, el alimento morralla o bien basura está íntimamente relacionada no solo con la obesidad mórbida sino más bien asimismo con graves problemas médicos de todo tipo: hígado, corazón, riñón y también, aun, con nosologías mentales.

Nuestro consejo…

Es muy sencillo: si, por las razones que sea, no puedes sentarte a comer como debe ser (de treinta minutos mínimo a una hora), prepara un tentempié saludable (fruta, cereales integrales o bien iogur desnatado) que te quite el apetito por un instante. Y, a la hora que puedas, te sientas a la mesa con un menú completo. Tómate tu tiempo. El alimento es un placer y requiere su ritual para gozarla. Hay múltiples recetas exquisitas y espléndidas para la salud que se preparan en un periquete.

Si todavía de esta manera, me afirmas que no dispones de este tiempo, entonces, deberías reconsiderarte tu forma de vida. Hazte esta pregunta: ¿Qué clase de existencia llevo si no puedo siquiera pararme a comer?.