Beneficios del masaje sueco para el cuerpo y la mente

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Beneficios del masaje sueco para el cuerpo y la mente

¿Qué es el masaje sueco?

¿Cómo funciona?

¿Qué es el masaje sueco?

El masaje sueco es una de las técnicas de masaje más usada en Europa y, como su nombre señala, creada en Suecia en mil ochocientos treinta por Henrik Ling, especialista en anatomía y fisiología, aparte de instructor de gimnasia de la Academia de Guerra Sueca de Karlberg, siendo el autor de la conocida Gimnasia Sueca.

Ling aprendió técnicas de masaje oriental que entonces combinó con sus conocimientos anatómicos y fisiológicos, lo que le sirvió para crear el el día de hoy conocido como masaje sueco y es considerado el predecesor de la Kinesioterapia.

¿De qué manera marcha?

El masaje sueco se fundamenta en la combinación de 5 pases esenciales que generan los efectos de supresión de toxinas amontonadas por tensión en los músculos, mejoramiento de la circulación sanguínea y, por ende, oxigenación de los tejidos. Todo ello genera eficacia muscular y relajación aportando bienestar psíquico y minoración del agobio.

Estos son los 5 movimientos primordiales del masaje sueco:

Fricción: Movimientos a lo largo del cuerpo en dirección ascendiente. Dejan relajar el cuerpo y prepararlo para el masaje.
Amasamiento: Estas manipulaciones del masaje sueco recuerdan el movimiento de amasar la harina y su función es la de fortalecer la circulación y aflojar tensiones más profundas, además de esto resultan muy relajantes.
Rodillos: Consiste en pellizcar suavemente la piel y subir, por servirnos de un ejemplo, de la lumbar al hombro, tal y como si enrollásemos la dermis. Genera una relajación de las capas externas de los tejidos y una irrigación sanguínea.
Fricción profunda: Movimientos en círculo que crean una sensación relajante y sedante.
Percusión: Se efectúa con las palmas de las manos ahuecadas y con suavidad. Se dan palmaditas rítmicas y suaves en espalda y extremidades. Esto estimula el sistema inquieto y la circulación sanguínea, fortaleciendo de forma agradable al paciente para asistirlo a salir del estado de relajación del masaje sueco de forma agradable y eficiente.

Beneficios del masaje sueco

El masaje sueco genera múltiples beneficios para el organismo y para el bienestar personal. Estos son ciertos más importantes:

Calma los dolores producidos por contracturas, tensión muscular, desligamientos, ciática, rigidez articular, etcétera
Estimula la circulación sanguínea y linfática eliminado toxinas y mejorando la alimentación y oxigenación de los tejidos.
Acelera la restauración de lesiones deportivas.
Palía el agobio.
Mitiga el insomnio.
Relaja, calma los nervios y genera sensación de bienestar.

Contraindicaciones

El masaje sueco tiene sus contraindicaciones o bien razones para abstenerse de recibirlo, como en el caso de heridas o bien cicatrices recientes, magulles y venas varicosas en las zonas a masajear.

En el caso de artritis asimismo en los puntos de tratamiento, de tromboflebitis y de osteoporosis. Asimismo hay que evitarlo en el caso de fiebre y tensión baja o bien alta.

En el caso de cardiopatías no percibir masaje sueco en el abdomen y en el caso de padecer procesos infecciosos en las zonas a tratar.

¿De qué manera es una sesión de masaje sueco?

El masaje sueco puede perdurar de treinta a noventa minutos y se efectúa en una camilla y en contacto directo con la piel del paciente. Se aplica un aceite de masaje a fin de que el deslizamiento sea sin fricción, calentándolo anteriormente en la mano a fin de que el contacto sea agradable.

Después se combinan los pases mentados en las zonas que el masajista y el cliente del servicio consideran oportunas. La sensación del masaje sueco ha de ser esencialmente agradable si bien en algún instante pueda ser tenuemente molesto al trabajar zonas doloridas, mas la sensación no debe pasar al dolor.

Y para finalizar…

Se acaba la sesión de masaje sueco saliendo del estado de relajación con la ayuda de los pases de percusión. El paciente se debe levantar despacio de la camilla para no marearse con el cambio brusco de presión arterial y el pasar del estado de relajación muscular al de activación.