Consejos eficaces para evitar la tensión

Articulo de Vida sana sobre Consejos eficaces para evitar la tensión.

Saber mas acerca de Consejos eficaces para evitar la tensión

Consejos eficaces para evitar la tensión

Como evitar la tensión

Cómo saber que hay tensiones

Como eludir la tensión

Desde mi experiencia de años relacionándome con mi tensión y con la de las personas con las que me relaciono cada día, puedo asegurar que tener tensión significa tener temor, vivir apurado y con duda por todo.

Es una forma de vivir desde un sacrificio incesante en resguardarnos a cambio de una “falsa seguridad”. Significa apreciar supervisar el futuro ahora, temiendo de que pasado mañana no seamos capaces de encarar nuestra realidad.

De qué forma saber que hay tensiones

El cuerpo es el reflejo de de qué forma vivimos y en él se proyectan todos nuestros pensamientos, emociones, sentimientos y acciones al día. Solo somos siendo conscientes del cuerpo cuando sentimos alguna tensión, alguna tirantez, algún dolor o bien molestia en diferentes zonas del cuerpo y es en la cabeza donde está el noventa por ciento de las tensiones.

Consejos eficientes para eludir la tensión

Cuando te percates de que existe alguna tensión en tu cuerpo es muy posible que proceda de tu psique. Así, tómate un instante para estar contigo, en solitario, para revisar tu cuerpo y calmar la tensión existente.

Ahora sugiero ciertas técnicas provenientes de un científico del planeta interior, Osho. Son técnicas tan simples que verdaderamente a mi me han ayudado mucho a disolver cualquier clase de tensión que he creado en mi cuerpo:

Crea más tensión y después relájate absolutamente

En cualquier lugar donde te halles, de pie o bien sentado, tensa el cuerpo tanto como puedas, prácticamente tal y como si fueses a explotar, hazlo a lo largo de 2 minutos y después relájate otros 2 minutos.

Haz todo género de muecas

Recostado, sentado o bien tumbado comienza a hacer muecas con tu cara. Te invito a que lo hagas ya antes de acostarte de noche y al despertarte por la mañana delante del espéculo. De noche te va a ayudar a reposar de forma profunda y por la mañana a preparar tu día con un tanto más de humor.

Es muy posible que al mirarte reflejado en el espéculo te rías de ti y de todo cuanto eres capaz de hacer con tu semblante. Experimenta esta técnica a lo largo de una semana y observa si la tensión desaparece.

Al hacer todo género de muecas se disolverán la mayor parte de tensiones del resto del cuerpo por el hecho de que la mayor parte proceden de tu psique y esta está en tu cabeza.

Relaja tus tensiones

Recostado en cama, como todos y cada uno de los días, antes que llegue el sueño observa como fluye tu energía desde los pies. Una parte de ahí, observa el interior: ¿hay tensión en algún lugar? ¿En las piernas, en los muslos, en el estómago? ¿Existe tirantez, tensión?

Si hallas tensión en alguna parte, trata sencillamente de relajarla. No te muevas de esa zona hasta el momento en que sientas llegar la relajación. Si todo tu cuerpo está relajado te olvidas de que lo tienes. Al olvidarte del cuerpo te sueltas plenamente, te abandonas y creas un estado de relajación completa.

Para eludir la tensión… sencillamente ríe, baila o bien haz deporte

En el momento en que te ríes con ganas, una carcajada salida del estómago, no solo de la cabeza sino más bien del estómago, liberará todas y cada una de las tensiones del cuerpo, de esta forma de simple, sencillamente ríe desde los pies hasta la cabeza.

Si no tienes razones para reírte, comienza sin ganas, haciendo sonidos tal y como si rieses y vas a ver como creas una risa hermosa y natural. Al comienzo, haz tal y como si rieses y la risa llega. Es como cuando no tienes ganas de nada y escuchas una música bonita, al comienzo no tienes ganas de moverte y tras unos minutos de manera espontánea te ves bailando o bien canturreando la canción que escuchas. Pruébalo y vas a ver que cambio. La risa es tan saludable. No hay otra medicina que pueda asistirte más a conseguir bienestar.

Busca experiencias que te hagan sentirte descuidado absolutamente, puede ser nadar, correr, danzar o bien algún deporte que te guste efectuar.

Ciertas reflexiones

Cuando cuidas tu cuerpo, lo alimentas con lo que precisa, lo mimas y le prestas la debida atención, esto es, lo amas, es imposible que tengas tensión.

Al cuerpo no hay que forzarlo, hay que convencerlo.

Como eludir la tensión

Vivir libres de tensión solo depende de nuestra actitud y de la manera en que cuidamos de nuestros pensamientos, nuestros actos y de nuestras palabras.