Las Setas, un alimento ¿animal o vegetal?

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Las Setas, un alimento ¿animal o vegetal?

¿Si no es planta, ni animal, qué son las setas?

Recolectar con amor las setas

Con la llegada del otoño (en España) cientos y cientos de personas se echan al monte en pos de setas. Para efectuar esta actividad es preciso conocer bien las especies para eludir las que pueden ocasionar intoxicaciones e inclusive la muerte.

Mas no menos esencial es emplear el los pies en el suelo para eludir la recolección desmedida de las setas comibles y la destrucción de las que son ignotas. Todas y cada una de las especies tienen su función en lanaturaleza.

¿Si no es planta, ni animal, qué son las setas?

Las setas no son más que la fructificación de un hongo y los hongos son el puente entre el reino vegetal y el animal. Hay que tener muy presente que todas y cada una de las setas son hongos, mas que no todos y cada uno de los hongos son setas.

En contraste a las plantas de arriba no tienen clorofila y están formados por celulosa y quitina. La quitina no es un material de las plantas verdes, sino más bien un factor perteneciente al reino animal, específicamente se halla en el caparazón de los insectos. Esta característica y su forma de alimentarse, aprovechando desechos orgánicos, ha llevado a muchos estudiosos a ubicarlos en un campo aparte, que no es ni vegetal, ni animal.

Al pie de las setas se puede observar en ocasiones los micelios, como unas raicillas más activas que las raíces de los vegetales, puesto que no solo se hacen cargo de absorber el comestible, sino más bien asimismo de degradarlo y alterarlo anteriormente, mientras que liberan sales minerales. Las esporas son las semillas y por lo tanto cumplen el papel de reproducción. La manera de cada una de las esporas sirve para acotar las diferentes especies.

Esto resulta realmente difícil, en tanto que en cada conjunto hay muchas variedades de aspecto multiforme y variable que, además de esto, cambia conforme medran. Su morfología es diferente conforme el tiempo, la temperatura, la flora y el medioambiente que las rodea.

Como su pluralidad es enorme, asimismo lo es la multitud de los hábitats en que podemos encontrarlas. Como no precisan de luz, como las plantas verdes, el suelo de los bosques aparece como el entorno ideal. Si bien asimismo hay setas en los prados, zonas marítimas, lugares húmedos y pantanosos y también, aun en lugares secos y dunas areniscas de las costas.

Estas últimas acostumbran a ser setas en simbiosis o bien parasitando alguna especie vegetal específica. En los bosques conforme el género de árboles y arbustos, de este modo van a ser las setas que aparezcan. Parece que en suelos ácidos medra una mayor pluralidad. En ocasiones las hallamos formando un “corro de brujas”. Esto sucede pues el micelio medra en redondo, mas al gastarse el sustrato del centro, queda alrededor un anillo muy regular.

En Europa se han clasificado unas dos mil quinientos especies de setas, solo un ciento son comibles y no pasan de veinticinco las que se pueden estimar de buenísima calidad. El resto o bien no tienen apenas carne, o bien son picantes, amargan, desprenden mala fragancia o bien no tienen gusto a nada. Son una minoría las setas venenosas o bien tóxicas, mas esto no es disculpa a fin de que cualquiera se dedique a procurarlas.

Recoger con amor las setas

Los hongos desempeñan una esencial función en el equilibrio ecológico de la naturaleza. Las setas son su parte fértil y aseguran la conservación de la especie. Las próximas pautas contribuyen a sostener el apreciado y preciso equilibrio para el bosque y al unísono, nos deja gozar de estos mágicos comestibles.

No coger de manera indiscriminada todos y cada uno de los ejemplares que nos parezcan comibles. Únicamente coger las especies que conocemos realmente bien.
Coger solo la cantidad precisa para nuestro consumo inmediato.
No es recomendable comer grandes cantidades de setas. Debido a la polución ambiental pueden contener metales pesados.
Respetar las setas que no conocemos, aun las venenosas, puesto que todas y cada una son útiles en su ambiente. Dejar los ejemplares demasiado maduros, o bien parasitados, a fin de que cumplan con su función reproductora.
Emplear cestos de mimbre que dejan una buena ventilación y evitan el aplastamiento. Las bolsas de plástico no dejan que la humedad se evapore y acelera la descomposición, además de esto no están bien protegidas y se rompen. El consumo de partes dañadas puede ser perjudicial.
No excavar ni rastrillar, para no dañar el desarrollo de los ejemplares que están comenzando a desarrollarse, ni las futuras fructificaciones.
Utilizar un cuchillo corto y afilado para recortar las setas a ras de suelo, sin dañar el micelio. Nos sirve asimismo para revisar si están sanas.

¿Son nutritivas las setas?

Dietéticamente hablando los platos a base de setas van a ser aproximadamente digestibles dependiendo de la cantidad y del resto de comestibles que las acompañan. Es mejor acompañarlas con ensalada fresca pues ayuda a anular y aporta la fibra precisa en un menú equilibrado.

Por norma general deberíamos tomarlos con moderación y medida, puesto que son de bastante difícil digestión. Las setas poseen un porcentaje esencial de proteínas con lo que su digestión es afín a la carne, así como difícil.

De su metabolismo resultan algunos productos tóxicos, como el ácido úrico (resultante de la humillación de las purinas) por lo que no son demasiado recomendables para personas con inconvenientes reumáticos, artríticos, de gota o bien nefríticos.

En cambio, dada su menguada composición glucídica, grasa y calorífica no deben preocupar en demasía a quien desee sostener su línea, ni a los diabéticos.

Ciertas personas presentan intolerancia a su carbohidrato más habitual, la trealosa.

Nos aportan una cantidad considerable de sales minerales entre aquéllas que abundan el potasio y el fósforo. Asimismo son ricas en manganeso, cinc, hierro, cloro, boro y azufre, escaseando el sodio. Hay que eludir recogerlas cerca de carreteras, de fabricas o bien lugares muy contaminados en tanto que tienden a absorber los metales pesados.

En lo que se refiere a vitaminas abundan la A (muy rebosante en el champiñón) la D y la K, vitaminas del conjunto B, (como la niacina (B3), biotina (B8) y ácido fólico (B9) y la vitamina C.

Desde cierto punto de vista curativo, las setas son buenas estimulantes de la actividadcerebral y inquieta, con lo que combaten de manera eficaz la fatiga intelectual. Debido a su riqueza en minerales son curativos de la anemia y convenientes en dietas de adelgazamiento.