Articulo de Animales sobre Aprendiendo el lenguaje de los perros.
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Aprender el lenguaje de los perros
El lenguaje corporal de los perros
Aprender el lenguaje de los perros
Que duda cabe que a todos los que hemos tenido alguna vez un can como mascota nos hubiese encantado poder aprender el lenguaje de los perros, si bien es verdad que con el tiempo se aprende a interpretar sus ladridos y los movimientos de su cuerpo, que son las herramientas que el can emplea para procurar hacernos comprender lo que desea o bien precisa encada instante.
Este artículo nos ofrece una guía que va a ayudar a los a los dueños a comprender un tanto mejor el lenguaje de los perros. Seguro que descubrimos alguna cosa interesante.
El lenguaje anatómico de los perros
Si deseamos aprender el lenguaje de los perros debemos tener clarísimo que , como , no solo emplean su voz para comunicarse, asimismo usan su cuerpo.
Ciertos ejemplos de su comunicación corporal:
Si miramos la cara de nuestro leal amigo descubriremos que puede enseñar signos de curiosidad, sorpresa, confusión o bien determinación.
Los ojos del cánido se alumbran cuando están contentos mas sus pupilas se dilatan cuando tiene temor.
Cuando el cánido es feliz y tiene ganas de jugar echa los labios cara atrás y enseña los dientes tal y como si estuviese sonriendo.
Si sus orejas están levantadas nuestra mascota presta atención, si las inclinas puede ser un signo de sumisión.
El movimiento y la situación de la cola asimismo nos señala si el can está contento, apacible, si tiene ganas de jugar, etcétera
Aprender el significado de los ladridos del can
Ladrar es otra forma de lenguaje canino, conforme como ladren o bien gruñan nos están procurando hacer comprender sus necesidades o bien sus estados anímicos.
En cierta forma, el can emplea el tono de forma afín al hombre: empleamos un timbre bajo cuando estamos tristes, sonoro en los enojos y alto cuando se expresa dicha o bien algún otro sentimiento de satisfacción.
¿Qué nos afirma el can con sus gruñidos?
Si nuestro can está contento y se siente bien gruñirá suavemente dejando al descubierto los dientes.
Cuando siente miedo emitirá gruñidos irregulares que cambian en intensidad.
Si nuestro cánido está enojado y desea lanzar una advertencia a su contrario emitirá un gruñido suave y incesante. Conforme va subiendo la frecuencia, aumenta la amenaza hasta llegar a un gruñido sonoro, con colmillos descubiertos y actitud amenazante: el combate va a iniciar.
¿Y con sus alaridos?
A veces el alarido del can es la contestación a un dolor que ha llegado por sorpresa, como por poner un ejemplo que le hayan pisado la cola.
Otras veces el alarido desea decir que tiene temor, en estas ocasiones el alarido va acompañado de actitudes miedosas como esconder el rabo entre las patas, etcétera
Si nuestro cánido emite alaridos repetitivos, entrecortados y en un tono ascendiente, procura llamar la atención del dueño a fin de que le dedique tiempo y juegue con él.
¿Qué pretenden decirnos cuando?
Gimen: esta expresión normalmente va acompañada de ademanes lastimeros y ojos caídos. Es el lenguaje propio de los cachorros y, realmente, tiene un solo sonido y 3 interpretaciones: apetito, frío o bien temor.
Para descubrir qué ocurre, es preciso respaldarse en factores externos: bajas temperaturas, estado de soledad
Cuando el que gime es un adulto, tiene otras connotaciones: lo más probable es que esté desando jugar o bien que tenga necesidad de salir a la calle.
Suspiran. El suspiro significa decepción o bien placer. Si nuestra mascota suspira sosteniendo los ojos abiertos nos está probando su decepción. Si, al contrario, el animal entorna los ojos, su estado es de total felicidad: todo cuanto lo rodea le genera placer.
Rugen: los rugidos prueban su poderío y seguridad. Los perros de compañía no es frecuente que rujan si bien no es imposible. Si el rugido va acompañado de alaridos, el animal dice algo como aquí estoy. Los canes muy mimados que se encaran a una situación de desazón procuran, de este modo, salirse con la suya.
Otras cosas interesante sobre el lenguaje de los perros
El saludo consiste en uno o bien 2 ladridos, agudos y breves, pronunciados en un tono intermedio.
Una situación de alarma provocará en él modulaciones continuadas y veloces, siempre y en toda circunstancia en un tono intermedio. De este modo anuncian que algo o bien alguien ignoto se aproxima a su territorio.
¿Quién anda ahí? Los ladridos que se interrumpen, con intervalos aproximadamente largos entre uno y otro, significan que el animal desea descubrir quién o bien qué está deambulando por su parte.
¡Se terminó! En el momento en que un perro desea poner punto y final a una situación que le disgusta, modula un ladrido agudo y muy breve. A veces asimismo es un imperativo: Necesito salir a la calle o bien me muero de hambre.
