¿Cómo nos afectan nuestros antepasados?

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¿Cómo nos afectan nuestros antepasados?

¿Afectan los ancestros a sus descendientes?

Bases de esta teoría

Las personas que compusieron nuestra familia y que ahora no están vivas, son nuestros antepasados. Estos se remontan tanto en el tiempo que se pierde el indicio de los probables orígenes de las ramas familiares.

En la tradición chamánica los antepasados tienen un sitio esencial, son reverenciados y los tienen presentes en el recuerdo. Cuando muere un miembro de la familia, retiran todas y cada una de las imágenes que lo representan por un periodo, para dejarlo marchar de manera libre sin retenerlo cerca de los vivos. Según ellos creen, a lo largo de un lapso de múltiples años, no se les debe “molestar” con solicitudes, puesto que tienen sus temas que solucionar en otros planos de existencia.

Asimismo consideran que tras fallecer, de vez en cuando son exactamente los mismos espíritus quienes escogen continuar cerca de la familia o bien de alguno de sus miembros a lo largo de un tiempo, con la intención de asistirlo o bien resguardarlo. Esta sería una visión positiva del tema.

¿Afectan los antepasados a sus descendientes?

Nosotros somos el resultado de muchas circunstancias precedentes que se fueron entrecruzando: multitud de personas tejieron el ramaje que ha confluido en cada uno de ellos de nosotros. Por lo tanto, somos consecuencia del suceder de abundantes hechos casuales, y la causa al tiempo, si ya tenemos hijos.

En el largo devenir de de cualquier estirpe, ciertos de sus componentes tuvieron destinos fatales. Fueron excluidos de la familia por no cumplir con los “mandatos” impuestos, por cometer alguna crueldad o bien murieron jóvenes, aun siendo bebés. Si hay omisión o bien una negación de la pertenencia de esa persona al clan familiar, ese ánima desea proseguir en él por medio de los miembros descendientes, puesto que su instinto de pertenecer como uno más, está muy arraigado.

Entonces sucede que se conservan hechos o bien circunstancias trágicas, tal y como si fuera una maldición. Coinciden datas y aniversarios de nacimientos o bien decesos, se dan reiteraciones de nombres que conllevan exactamente el mismo destino de un predececesor fallecido, enfermedades que semejan reproducirse frecuentemente en la familia, etcétera

Bases de esta teoría

Conforme Alejandro y Cristóbal Jodorowsky (exactamente, padre y también hijo), el clan familiar * tiene una fuerza centrípeta, que anula las personalidades en busca de la supervivencia de la mayor parte de miembros del conjunto familiar. Por ese motivo es tan complicado sustraerse a la repercusión de los deseos y reglas que subyacen en todos y cada familia: la consigna tácita es “si no cumples con lo estipulado, vas a ser expulsada/o”.

En todos y cada unidad familiar hay unas leyes dominantes propias, que se deben proseguir por todos y cada uno de los constituyentes como condición “sine qua non” para ser admitido. Eso tiene un peso tremendo en quienes con lo que sea, se niegan a proseguir el camino trazado para tomar el propio. Y en ocasiones lo hacen a costa de mucho sufrimiento y de fallar en todo cuanto emprendan.

* Entendiendo exactamente el mismo como algo que se remonta mucho alén de nuestros progenitores, abuelos o bien bisabuelos.

Bert Hellinger charló del “Orden del Amor” (los Progenitores dan, los Hijos reciben) y consideró la problemática individual como una parte de un sistema más grande, que se debía tener en consideración si se quería solucionar.

¿Qué podemos hacer para compensar esta repercusión?

Los Jodorowsky insisten en la relevancia de pesquisar en el árbol genealógico, y Alejandro llamó a este trabajo “Psicogenealogía”. Su preparación multidisciplinar precedente, terminó convergiendo en lo que llamó “Acto Psicomágico”, que aplica eminentemente para destrabar esos nudos invisibles que nos sostienen sujetos a la tiranía familiar.

Este acto con fuerza terapéutico y con connotaciones artísticas, reproduce a nivel simbólico un símil de la situación paralizante. Esa puesta en escena habla de forma directa al inconsciente por el hecho de que usa su lenguaje: las imágenes.

Es una acción liberadora que sana no solo a quien la efectúa, sino más bien a los miembros de la familia que están implicados. Se puede estimar que este acto anula la repercusión en un aspecto específico, si bien habría que ver si hay más situaciones pasadas, que nos puedan estar condicionando.

Otra técnica que tiene en consideración la repercusión de los antepasados en sus descendientes, son las Constelaciones Familiares y Sistémicas, que implantó Bert Hellinger.

En esto coinciden todas y cada una de las teorías: nuestras raíces proceden de nuestra familia y por esta razón es esencial hallar el punto de confluencia, haciendo las paces entre quienes somos a nivel individual y nuestra familia de procedencia.