Cuando comer la fruta, ¿antes o después de las comidas?

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Cuando comer la fruta, ¿antes o después de las comidas?

Cuándo comer fruta

Cómo comer fruta

En qué momento comer fruta

La fruta tiene un tiempo de digestión muy corto; en unos veinte-treinta minutos ha atravesado el estómago para llegar a nuestro intestino, donde absorberemos y asimilaremos sus nutrientes. Si la combinamos con otros comestibles, los que tienen la digestión considerablemente más lenta, la fruta no pasa de forma directa al intestino delgado, sino se mezcla en el estómago con el resto de comida.

Al retardar su digestión, la mezcla empieza a fermentarse acidificando nuestro estómago y puede hacer que nos sintamos hinchados o bien que tengamos acidez.

Este es el motivo por el que la fruta ha de ser ingerida con el estómago vacío. Podemos tomar fruta toda vez que estemos seguros de haber digerido bien el alimento precedente (dos-tres horas). Tras comer fruta vamos a poder tomar otros comestibles pasados unos treinta minutos más o menos, en tanto que la digestión de la fruta es considerablemente más veloz como ya hemos comentado.

Tampoco debemos tomar diferentes géneros de fruta en exactamente la misma comida.

De qué manera comer fruta

Ya sabemos cuando comer fruta, cuando tengamos el estómago vacío. Mas ahora se nos plantea otra pregunta: ¿de qué forma debemos comer la fruta?

La fruta debemos ingerirla fresca y cruda. Nuestro organismo no es capaz de conseguir ningún beneficio de aquella fruta que haya sido procesada o bien cocinada. Al someterlas al calor las frutas pierden una gran parte de sus vitaminas y de sus nutrientes.

Beneficios de las frutas conforme sus colores

Ya sabemos que las frutas tienen importantes beneficios para la salud, sabemos en qué momento tomarlas y de qué forma, mas ¿sabias que las propiedades de las frutas están relacionadas con su color?

Blanco: cuantas más frutas de carne blanca comamos, como manzanas y peras, menos peligro vamos a correr de padecer un ataque cerebrovascular o bien ictus.
Colorado-morado: las frutas de estos colores son buenas para nuestra salud cardiovascular y previenen la hipertensión merced a sus propiedades vasodilatadoras. Además de esto resguardan nuestra piel de las quemaduras producidas por el sol. Cerezas, sandía y uvas son ciertos ejemplos de frutas de este conjunto.
Naranja-amarillo intenso: poseen gran cantidad de antioxidantes que resguardan y alimentan nuestra piel. Tienen propiedades fotoprotectoras y por consiguiente nos resguardan de los rayos UVA. Ciertas frutas pertenecientes a este conjunto son: zanahoria, mango, papaya, los cítricos…
Vegetales verdes: son ricos en magnesio. El magnesio interviene en los procesos de relajación muscular. En consecuencia, no comer los bastantes vegetales de color verde puede llevarnos a un déficit de magnesio provocándonos tensión muscular, calambres o bien cansancio de forma supuestamente infundada. Ciertos ejemplos de vegetales pertenecientes a este conjunto son las espinacas, el brócoli, los guisantes, las coles de Bruselas…

Conclusión

Es indispensable alimentar al organismo con frutas. Cada fruta tiene su beneficio: las peras poseen muchos minerales (calcio, magnesio, fósforo, potasio y vitamina C), y además de esto fortalecen las funciones digestibles y hepáticas; la piña ayuda a la digestión y supresión de grasas; el plátano favorece la producción de insulina en el páncreas y calma la inflamación de colon, etcétera

Por estas razones y considerablemente más, animamos a la gente a tomar fruta, mas siempre y en todo momento prestando atención a de qué forma las tomamos y en que instante, para hacerlo de la manera conveniente y sin que nos provoque ningún género de malestar.