Mascarillas de arcilla, adiós a la grasa de tu piel

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Mascarillas de arcilla, adiós a la grasa de tu piel

Si, son excelentes, pero… ¿servirán para mi tipo de piel?

Y si mi piel es seca ¿podré usarlas?

La arcilla es uno de los ingredientes más utilizados para adecentar y purificar nuestra piel. Las mascarillas de arcilla vienen siendo utilizadas desde tiempos inmemorables y su empleo día a día se está propagando pero por su eficiencia probada.

Si, son geniales, pero… ¿servirán para mi género de piel?

Aunque las mascarillas de arcilla son ideales para todo género de piel lo cierto es que su eficiencia es total en pieles grasas, sobre todo las propensas al acne y con puntos negros.

Y si mi piel es seca ¿voy a poder emplearlas?

Si nuestra piel es seca, sensible y/o frágil vamos a tener la cautela de incorporarle aceites calmantes como la caléndula y una cucharadita de miel

Preparación de las mascarillas de arcilla

Las venden ya listas para emplear mas siempre y en toda circunstancia podemos prepararlas en casa en tanto que es una alternativa muy asequible. Además de esto vamos a poder efectuar miles y miles de variaciones.

Preparación pasito a pasito

Es fundamental no emplear recipiente ni ningún otro aparejo de metal, el agua deberá ser destilada o bien purificada, jamás del grifo.
Mezcla el agua y la arcilla hasta formar una pasta uniforme (para la cara con una cucharada sopera basta). El grosor de las mascarillas de arcilla debe ser de medio centímetro puesto que de lo contrario se seca demasiado pronto y provoca tirantez.
Agregar unas gotas del aceite esencial apropiado.
Con la cara desmaquillada y limpia, aplícate la mezcla (mascarilla de arcilla). Evita siempre y en toda circunstancia la zona de los ojos.
Aplica sobre los ojos un algodón humectado con agua de rosas, violetas o bien Eufrasia, cierra los ojos y descansa a lo largo de quince-veinte minutos.
Retira la mascarilla de arcilla (tras unos veinte minutos) con agua y una esponjita apropiada, seguidamente hidrata y alimenta tu piel con el aceite esencial utilizado o bien con tu crema preferida.
Podemos ponernos las mascarillas de arcilla una vez por semana (al comienzo) y después cada 15 días. Siempre y en todo momento va a depender de cada caso.

¿Qué aceite va a ser el apropiado para mí?

Puedes incorporar a tus mascarillas de arcilla unas gotas de aceite de almendras dulces y si tu piel es grasa cuatro-cinco gotas de aceite esencial de limón (astringente) o bien jojoba (sebo-regulador); si tu piel es sensible: caléndula (calmante); piel apagada y desnutrida: rosa de mosqueta (regeneradora); piel avejentada y seca: argán (nutritivo y dermatológico); piel con acné: argán y/o jojoba; piel mixta o bien grasa: aceite del árbol del té (antibacteriano).

*Esto son solo ciertas sugerencias, atrévete a efectuar tus y adaptadas mascarillas de arcilla.