Pan con Tomate

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Pan con Tomate

Origen del pan con tomate

Pà amb tomaquet, una buena opción

Origen del pan con tomate

Es realmente posible que en un comienzo las rebanadas de pan se untasen solo con ajo, aceite y un tanto de sal y es que el tomate no llegó a las tierras de Iberia hasta el siglo XVIII.

En aquellos tiempos la gente no se podía permitir el lujo de desaprovechar el alimento ni, lógicamente el pan. Cuando llegaron los tomates alguien cilindro la feliz ocurrencia de “restregar” los tomates maduros sobre rebanadas de pan, que estaba un tanto duro, agregar un chorrito de aceite y ya tenían listo un almuerzo o bien una merienda.

Las primeras referencias escritas sobre el pan con tomate proceden de mil ochocientos ochenta y cuatro y cuenta como esta era la manera en que los payeses aprovechaban el pan que se había embrutecido.

En tierras catalanas, valencianas y mallorquinas ha estado presente en todas y cada una de las mesas y ha sido la merienda ideal de muchos pequeños, por suerte su empleo se ha extendido por toda la península y ya lo podemos gozar en gran cantidad de bares y restoranes.

Pà amb tomaquet, una buena opción

Muchas veces no sabemos que dar de merendar a los pequeños y, desgraciadamente, optamos por algún producto de bollería o bien por algo que contenga chocolate, darles una buena rebanada de pan con tomate, unas gotas de aceite y, ¿por qué razón no?, una locha de jamón es una merienda muy saludable para los peques.

Creamos que con esta receta a los nutrientes del trigo le agregamos los beneficios del ajo y del aceite de oliva (protección cardiovascular) y las del tomate (aporte de vitamina C y del antioxidante Licopeno) Esto ayuda a compensar las grasas menos saludables que la gente toma al acompañarlo con embutidos, haciendo además de esto que el pan sea más jugoso.

Ingredientes para el pan con tomate

Rebanadas un tanto torradas de pan de “payés” de un dedo de grosor más o menos (es un género de pan de trigo que deja unas grandes rebanadas) Asimismo podemos hacer servir el pan que tengamos a mano.
Aceite de oliva de primera presión en frío (extra virgen).
Sal marina.
Ajo crudo (dientes de ajo) pelado.
Tomates maduros (resulta conveniente utilizar aquellos tomates que tengan mucho jugo y poca pulpa).
Por norma general se pone sobre la rebana lonchas de embutidos (jamón, chorizo, etcétera mas podemos emplear asimismo queso, tortillas (huevos), lonchas de tofu o bien sencillamente no poner nada encima).

Preparación del pan con tomate

Torramos las rebanadas de pan sin pasarnos en tanto que no deben quedar demasiado secas.
Sobre el pan torrado frotamos el diente de ajo que vamos a haber pelado y partido por la mitad.
Ahora partimos un tomate y lo estregamos solo sobre un lado de la rebanada.
Echamos un chorrito de aceite de oliva y una pizquita de sal.

Nuestro consejo

Primeramente afirmaremos que solo se sazona una cara o bien lado del pan.
No hay que prepararlo con mucha antelación (no más de treinta minutos) sino más bien el pan se ablanda.
Lo idóneo es servir las torradas calientes y cada comensal que se lo prepare mismo a su gusto (con ajo o bien sin, con aproximadamente aceite, con o bien sin sal).