Articulo de Problemas de salud sobre Causas de la mala circulación de las piernas.
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Causas de la mala circulación de las piernas
Síntomas de la mala circulación de las piernas
Causas de la mala circulación de las piernas
La mala circulación en las piernas acostumbra a ser ocasionada por hábitos vitales, con lo que puede ser mejorada con determinada sencillez si se soluciona a tiempo y no estamos muy aferrados a esos hábitos perjudiciales. Es tarde cuando son una parte de la sintomatología de enfermedades como obesidad, colesterol, diabetes, etcétera, mas no irreversible.
Veamos las causas más habituales de mala circulación de las piernas:
Sedentarismo: La carencia de actividad física desgasta la musculatura encargada de la circulación.
Estar muchas horas de pie: El efecto de la gravedad y la inactividad afecta a este inconveniente que afecta sobre todo a profesionales que deben pasar un buen tiempo de pie.
Mala alimentación: Una dieta alta en grasas sobresaturadas y baja en fibra, verduras y frutas no solo es mala para la circulación de las piernas, si no para el corazón y todo el sistema circulatorio
Tabaquismo: La nicotina angosta las arterias complicando el paso de la sangre, fortaleciendo el inconveniente o bien ocasionándolo.
Medicación: Asimismo es un efecto secundario de determinados fármacos.
Calor y frio: Exponerse de forma continuada a temperaturas de calor o bien de frío asimismo influye en la aparición de esta enfermedad.
Síntomas de la mala circulación de las piernas
Los primordiales síntomas de mala circulación de las piernas son:
Cansancio al poco de estar de pie quieto o bien al poco de estar caminando.
Hinchazón de las piernas sobre todo en verano con el calor.
Hormigueo o bien calambres nocturnos.
Dolor y pesadez en las piernas.
Temperatura baja en la zona.
Dados estos síntomas, si bien sean leves, preguntar con su médico por si acaso puede haber un inconveniente de circulación mayor. Si bien si son leves no hay de qué preocuparse. Cuando son graves podrían decaer en una flebitis o bien aun algún inconveniente peor si no se tratan a tiempo.
Antídotos naturales para la mala circulación de las piernas
Baños de jengibre: Este baño se prepara poniendo una cuarta parte de raíz de jengibre molido en dos litros de agua bastante caliente. Ya antes de introducir los pies revisar que no queme. Es un antídoto tradicional de los países orientales.
Ginkgo biloba: Es una planta originaria de China con geniales propiedades para alentar la circulación. Mas deben preguntar su toma las personas que estén en tratamiento con anticoagulantes y antiplaquetarios o bien trombolíticos, incluyendo la aspirina. Preguntar la dosis.
Cayena molida: La cayena tiene altísimo contenido en salicilatos que asisten a sostener la fluidez de la sangre. Se recomienda tomar un vaso de agua con un poco de pimienta de cayena molida diariamente.
Alimentación para mitigar la mala circulación de las piernas
En las causas de la mala circulación de piernas vemos que una repercusión esencial se halla en la mala nutrición. Por consiguiente una conveniente alimentación es asimismo parte esencial de su tratamiento. Además de bajar los comestibles grasos y acrecentar los sanos, asimismo podemos tener en consideración lo siguiente:
Comer comestibles rebosantes en potasio como hortalizas y verduras, plátanos o bien otras frutas.
Una vaso de vino en el almuerzo, en especial el tinto, es ventajoso no solo para la circulación sino más bien para el corazón.
Complementos nutricionales como la vitamina liposoluble E y vitamina B3 esenciales en la circulación y salud del sistema circulatorio
Tomar agua regularmente ayuda a sostener la fluidez de la sangre.
De qué forma prevenir la mala circulación de las piernas
La prevención de la mala circulación de las piernas es sencillísima con pequeños detalles diarios como:
Prescindir de prendas ajustadas y menos todavía para acostarse.
Eludir comidas con alto contenido en grasas sobresaturadas.
No sobrepasarse con la sal puesto que retiene líquidos perjudicando la circulación
Hacer ejercicio. No es preciso ir al gimnasio, es suficiente con desplazar las piernas mientras que se está sentado o bien pasear cinco minutos de puntillas, mas mucho mejor si corre o bien pasea en bicicleta o bien practica natación.
Además de esto, como afirma la sabiduría popular: Más vale prevenir que curar.
