Diagnostico del Hara

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Diagnostico del Hara

El Hara en el shiatsu

El movimiento del Hara en el shiatsu

La palabra Hara es de origen nipón y describe la parte comprendida entre el tórax y la pelvis. En la cultura oriental el Hara es algo más que una zona anatómica y es una zona de las zonas más esenciales del cuerpo. Es el punto medio del cuerpo donde se concentra la energía que sale de la tierra y la que viene del cosmos (fuerza centrifuga y fuerza centrípeta) y donde se halla su sitio de equilibrio. El movimiento o bien la respiración brotan de esta zona, con lo que sostener el Hara en una estupenda condición es principal para tener una buena salud.

El Hara en el shiatsu

El shiatsu con efectos terapéuticos tiene su origen en el Ampuku (masaje sobre el Hara), técnica vieja nipona que trataba los desequilibrios basándose en la presión y la manipulación del abdomen.
A nivel técnico un buen control sobre el Hara es imprescindible para efectuar un buen tratamiento, en tanto que todas y cada una de las técnicas básicas del shiatsu parten del movimiento desde el Hara.

El movimiento del Hara en el shiatsu

En las técnicas de shiatsu el movimiento brota del Hara del terapeuta y se transmite al cuerpo del paciente a través de las manos, los dedos o bien las rodillas; de esta forma se logra una comunicación directa entre los 2 y se pueden percibir y tratar los diferentes desequilibrios que presenta el paciente. Para lograr este efecto es de vital relevancia la colocación del terapeuta y el enfoque de su Hara cara el receptor puesto que una buena situación deja trasmitir de manera libre el movimiento y evita que haya tensión en la presión.

El movimiento debe ir acompañado de la respiración, para lograr un efecto pero profundo y conectar de una forma más eficaz con el paciente.

Diagnostico del Hara

En el shiatsu hay 2 escuelas que utilizan métodos diferentes para diagnosticar a través del Hara:

Shiatsu Zen: esta escuela se fundamenta en el recorrido de los meridianos descritos por Masunaga y que tienen su origen en el Hara. Los practicantes de shiatsu zen valoran el estado de los órganos y de los meridianos a través del Hara para entonces compensarlos por medio de las técnicas de presión o bien dispersión.
Shiatsu Namikoshi: en este procedimiento se hace un tratamiento profundo sobre el Hara, en la última una parte del tratamiento. Se trabaja con técnicas de manipulación y sobre veintitres puntos que guardan relación con los diferentes órganos del cuerpo.

Tratamiento del Hara con shiatsu

La zona del Hara es muy frágil puesto que cobija órganos esenciales que no están protegidos por una estructura ósea, con lo que al tratarla con shiatsu hay que poner singular atención continuar unas cautelas básicas:

Tocar el Hara con la mano caliente.
Acompasar la presión con la respiración del paciente, presionando cuando este exhala.
Hacer una presión que no resulte dolorosa.

Al presionar el Hara aparecen puntos de tensión que se trabajan con una presión suave y mantenida, lo que deja una mayor profundidad de tratamiento, poder trabajar de forma directa sobre los diferentes órganos para liberarlos de tensión y lograr una mejor circulación en la zona.

El trabajo con shiatsu sobre el Hara asimismo tiene un efecto de liberación sobre el diafragma, lo que deja una mejor respiración y trabajar sobre bloqueos sensibles que se expresan en esta zona.