Postura de parto ¿Cuál es la mejor?

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Postura de parto ¿Cuál es la mejor?

¿Cuántas posturas diferentes de parto hay?

¿Posición vertical o posición horizontal?

No hay una única postura de parto ideal, va a depender de cada mujer y de cada parto. El instinto natural señala en todos y cada instante cuál es la mejor postura, la más cómoda para la mujer es siempre y en todo momento asimismo la más fisiológica.

De forma tradicional en los centros de salud españoles, las mujeres acostumbran a dar a luz recostadas con sus piernas abiertas (litotomía) o bien asimismo llamada situación ginecológica, y esta es la postura más desaconsejable para el buen desarrollo del parto.

Concebida para comodidad del personal sanitario y para asegurar la situación de subordinación de la mujer, la situación tumbada es inexcusable en la actualidad, como todos y cada uno de los estudios científicos lo prueban.

¿Cuántas posturas diferentes de parto hay?

En tanto que no hay una única postura de parto ideal, la mejor es con la que la mujer se sienta más a gusto. Lo más usual va a ser una combinación de múltiples posturas a lo largo de todo el proceso del parto.

Parto de pie o bien vertical: desde tiempos recónditos, las mujeres han parido de pie a fin de que la fuerza de la gravedad ayudase a la expulsión del bebé. Ciertas variaciones de esta postura, sosteniendo el leño erguido son: sentada, de rodillas o bien de cuclillas. Esta situación es la más fisiológica y natural tanto para el bebé para la madre eludiendo lesiones en la columna. La salida del bebé en situación vertical, facilita una dilatación mayor de la vagina. La única desventaja es que se puede generar una mayor pérdida de sangre, incrementando el peligro de hemorragia.
Parto de costado: asimismo tumbadas, ciertas madres prefieren agacharse sobre un lado para dar a luz. Esta postura aporta a la madre una mayor relajación y además de esto evita lesiones en el periné.
Posturas combinadas: la opción más extendida es ir mudando múltiples posturas en las distintas etapas del parto y de este modo, eludir el cansancio de continuar en exactamente la misma postura todo el tiempo.

¿Situación vertical o bien situación horizontal?

En situación vertical, y sobre todo de cuclillas, los músculos que rodean la vagina se abren, ensanchando y acortando el canal vaginal. Conforme los defensores del parto vertical, la fuerza de la gravedad facilita la salida del bebé y el alumbramiento es más veloz.

Recientes estudios científicos han probado que quedarse tumbada en la primera fase del parto extiende todo el proceso.

Estudiosos de Cochrane Collaboration en Australia, con datos recogidos de todo el planeta, llegaron a esta conclusión tras efectuar veintiuno estudios, llevados a cabo en países desarrollados desde los años sesenta, en los que participaron tres mil setecientos seis mujeres.

Conforme su informe, la primera fase del parto se acortó en más o menos una hora en aquellas mujeres que adoptaron una situación erguida en comparación con las que se quedaron tumbadas.

“En la mayor parte de los países en desarrollo las mujeres continúan de pie o bien pasean en las fases tempranas del parto sin padecer efectos adversos”, asevera la autora primordial del estudio, doctora Annemarie Lawrence, del Instituto de salud materno-infantil del centro de salud de Townsville en Queensland (Australia)

Los datos prueban que “hay beneficios y ningún peligro al estar erguida o bien en movimiento a lo largo de la primera fase del parto”, asevera la doctora Lawrence. Por todo ello, aconsejan a las mujeres que adopten cualquier situación de parto que hallen más cómoda y “eviten estar acostadas”.

Conclusiones

Como asevera Michel Odent, renombrado médico francés defensor del parto natural: “la peor situación para alumbrar, tras haciendo el pino, es la de litotomía” (tumbada sobre la espalda)

En toda la historia de la humanidad y ya antes de popularizarse la situación tumbada, las mujeres siempre y en toda circunstancia han optado por un parto vertical. El parto vertical es el que más se ajusta a la fisiología femenina, el más natural.

Hoy día, las mujeres piden nuevas posturas para dar a luz, como el parto en el agua asimismo va ganando cada días un poco más adeptos tanto entre las mujeres como en el personal médico.

Lo esencial es que la mujer se sienta libre de seleccionar, puesto que la manera de alumbrar es una resolución personal.

Es esencial informarse con el médico de las distintas opciones de posturas de parto, y descartar las que puedan representar un peligro para la madre o bien el bebé conforme las peculiaridades de cada embarazo.

Bibliografia: “El bebé es un mamífero” (Michel Odent) y “La revolución del nacimiento” (Isabel F. Del Castillo)