Principios del tratamiento de shiatsu durante el embarazo

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Principios del tratamiento de shiatsu durante el embarazo

Sintomatología del embarazo

Shiatsu y embarazo

El embarazo es uno de los procesos más esenciales para la mujer. Sentir como esta alimentando y dando protección al nuevo ser que se esta formando lleva a probar unas emociones y sentimientos muy singulares.

El estado gestacional que se extiende a lo largo de treinta y nueve semanas y que desemboca en el nacimiento de una nueva vida genera una serie de cambios de naturaleza física, hormonal y química que pueden generar ciertas molestias y nosologías aproximadamente graves, con lo que es recomendable usar todas y cada una de las herramientas naturales posibles para cuidarse a lo largo de este periodo.

Sintomatología del embarazo

Una de las peculiaridades más esenciales del embarazo es el incremento de peso y volumen, lo que acarrea una sobrecarga de la zona lumbar que acostumbra a provocar lumbalgias de diferente grado. El peso asimismo puede provocar pinzamientos sobre el nervio ciático (ciática)

Otras nosologías corrientes son vómitos, mala circulación, hinchazón de tobillos y rodillas, venas varicosas, ahogos…

En el campo de Medicina China podemos localizar debilidad de Riñón, déficit de sangre o bien bloqueo de energía provocada pues la situación del embrión que evita un movimiento conveniente de la energía ascendiente y descendente del Calentador medio (zona abdomen, diafragma)

Shiatsu y embarazo

A lo largo del periodo del embarazo se puede percibir shiatsu para calmar los desequilibrios que vayan apareciendo y gozar de un embarazo con un buen estado de salud. Una sesión normal de shiatsu es de una hora aproximada, para el embarazo efectuaremos sesiones un tanto pero cortas (cuarenta y cinco minutos) Hasta el tercer mes podemos trabajar con shiatsu en cualquier situación, después vamos a trabajar en situación lateral ayudándonos de cojines y mantas a fin de que la receptora esté cómoda.

Las sesiones de shiatsu se efectúan con el receptor vestido con ropa cómoda y holgada a ser posible de fibras naturales para progresar el contacto.

Para el shiatsu a lo largo del embarazo es esencial que el terapeuta de shiatsu tenga una buena capacitación, bastantes años de experiencia y que la madre sienta confianza en la persona que la esté tratando. Hay terapeutas expertos en el embarazo que pueden acompañar a la futura madre a lo largo de todo el proceso, dándole rutinas singulares de ejercicios o bien pautas de nutrición.

Principios del tratamiento de shiatsu a lo largo del embarazo

Compensar las zonas más cargadas del cuerpo (zona lumbar, cervical, piernas)
Alimentar la sangre y fortalecer el riñón.
Desplazar la energía y suprimir los bloqueos que aparezcan.
Fortalecer el Bazo y liberar la humedad del cuerpo.

A lo largo de la sesión de shiatsu para el embarazo es bien interesante conectar con el ciclo de respiración de la paciente y presionar cuando hay expiración, con esto logramos una mayor relajación y un mejor efecto y profundidad; asimismo debemos poner singular atención a nuestra presión en tanto que ha de ser lenta, mantenida, sin trabajar con demasiada profundidad y retirándola delicadamente y lentitud.

Es esencial la calidad del contacto, puesto que se debe trasmitir confianza y seguridad, esto se logra haciendo un trabajo de concentración y también empapando el tratamiento con calidez y respeto.

A lo largo del embarazo tratamos a 2 personas, en consecuencia es esencial trabajar para fortalecer la energía original del embrión, esto se logra a través de la estimulación de determinados puntos que tienen correspondencia con el riñón, en tanto que este órgano se hace cargo de alimentar y aportar esencia al embrión (conforme la Medicina Tradicional China)

Shiatsu y zonas a eludir a lo largo del embarazo

Hay ciertas zonas del cuerpo y puntos concretos que se emplean para inducir el parto, con lo que hay que eludir trabajarlas. Estas zonas son:

Parte superior del músculo trapecio, de forma especial el segundo de los 4 puntos que se ubican a lo largo del haz superior.
Zona interna de las piernas, de manera especial un punto ubicado a tres dedos sobre el maléolo interno.
La zona del sagrado.
Los huecos de las rodillas.

Todas y cada una estas zonas se pueden usar cuando el instante del parto se retrasa y deseamos inducirlo. Asimismo se puede alentar un punto del meridiano de vejiga a través de la Moxibustión para virar el embrión, cuando se presenta de nalgas.

Conclusión

Percibir sesiones del shiatsu a lo largo del trascurso del embarazo es una forma de llegar al parto en un buen estado de salud y de llevar este periodo con el mayor bienestar posible. Para el terapeuta de shiatsu trabajar a lo largo del embarazo es una agradable experiencia en tanto que se conecta con la nueva vida que se está formando y se puede comprender mejor este fantástico proceso.

Con el shiatsu asimismo se puede efectuar un tratamiento posparto, a fin de que la receptora vaya reequilibrando su cuerpo y para flexibilizar y poner la cadera.