Ergonomía en el hogar, algunas recomendaciones

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Ergonomía en el hogar, algunas recomendaciones

Ergonomía y labores del hogar

Recomendaciones ergonómicas para las labores domésticas

Ergonomía y tareas del hogar

Existen distintas labores que implican un esmero mayor de lo aparente para las articulaciones debido a que son actividades físicas leves, que sin activar los mecanismos que preparan el cuerpo para una acción moderada o bien fuerte, pueden ser exigentes físicamente al tener que sostener una situación erguida y estática mucho rato, como por servirnos de un ejemplo al planchar.

Recomendaciones ergonómicas para las tareas familiares

Hay algunas recomendaciones ergonómicas a fin de que las tareas familiares sean menos perjudiciales, contamos las mejores maneras de hacer las más importantes:

Barrer y fregar el suelo ergonómicamente

Lo primero es que el palo del cepillo o bien la fregona tengan la longitud suficiente para no tener que encorvarse y sujetarlo a la altura entre el pecho y la cadera. Al barrer o bien fregar el mejor movimiento para eludir sobrecargas es lo más cerca posible de sus pies y moviendo solo los brazos, sin proseguirlos con la cintura y intentando siempre y en toda circunstancia sostener la columna continuamente vertical y no doblada.

Utilizar la aspiradora de forma ergonómica

Adoptar exactamente la misma postura que para barrer y fregar mas flexionando algo más la rodilla avanzada. En el caso de inclinarse para pasar la aspiradora bajo un mueble, hágalo doblando una de las rodillas en el suelo. Asegúrese de sostener la espalda recta y, si debe doblarla, apoye la mano libre en la rodilla o bien sobre el suelo.

Adecentar los cristales y ergonomía

Para adecentar cristales y alicatados la mejor postura es adelantar el pie derecho y retrasar el izquierdo, respaldarse con la mano izquierda a la altura de su hombro y utilizar la derecha para adecentar. Cada cierto tiempo invierta la postura.

Sostener el brazo que limpia con el codo flexionado y adecentar desde el pecho hasta la altura de sus ojos. Si debe adecentar a una altura superior súbase a una escalera y tenga una de las manos apoyada con la espalda recta y el peso repartido entre sus pies y la mano apoyada.

Planchar

Es precisa una tabla de planchar alta, sobre la altura del ombligo o bien ligeramente por encima. La mejor postura es poner un pie en alto y apoyado sobre un reposapiés o bien afín y también ir alternando los pies.

En el caso de hacer fuerza sobre la superficie, ponga los dos pies en el suelo con uno más atrás y apoye la mano libre en la mesa. Ahora use el brazo, y no su peso, para presionar la plancha contra la tabla. De esta manera su peso se reparte entre la mano de apoyo y los pies y no en la columna.

Fregar los platos

La altura adecuada del fregadero es la del ombligo para mantener la loseta sosteniendo la espalda derecha y los codos en un ángulo de 90º. Alternar los pies apoyándolos en un reposapiés y al pasar los platos de un seno del fregadero al otro, hágalo con los brazos, sin desplazar la cintura.

Labores de la cocina y ergonomía

Para aligerar las molestias de espalda derivadas de las labores de la cocina primero precisamos una cocina ordenada ergonómicamente: Los objetos más pesados han de estar puestos en muebles con cajones o bien ménsulas que se hallen a la altura de la cadera o bien del pecho. Al paso que los pesos intermedios bajo lo precedente y los más ligeros en los muebles altos.

Para lograr objetos de muebles a ras de suelo colóquese de cuclillas frente al guardarropa, con los pies parcialmente separados y esporádicamente apóyese con una de las manos en la encimera. En el caso de continuar cierto tiempo buscando, apóyese con las dos manos en la encimera y arrodíllese frente al guardarropa con sus nalgas apoyada en los talones.

Hacer las camas ergonómicamente

Para hacer las camas ponga la sábana sobre la cama fijando sus extremos a las esquinas del jergón y ponga un pie frente al borde y el otro paralelo al borde que forma el rincón, flexione las rodillas y levante el rincón del jergón con la mano cuyo pie del mismo lado tiene puesto de frente, estirando las rodillas si hace falta, y con la otra mano ajuste la sábana.

Mas si tiene molestias en la espalda, puede ponerse de rodillas en frente de el rincón y fijar de este modo los extremos de la sábana bajo el jergón, apoyándose en el jergón con los brazos para arrodillarse y también incorporarse.

Es preferible separar la cama de la pared, si está pegada a exactamente la misma, para poder hacerla rodeándola totalmente.

Cargar la adquisición

Toda vez que pueda, que le manden la adquisición a casa, mas si no queda otra, la manera adecuada es repartir el peso entre las manos y asimismo en una mochila si es preciso. En el caso de usar un carro mejor, mas llévelo delante de en vez de arrastrarlo. Procure no llevar más peso del que le resulte cómodo.