Discalculia, dificultad en el aprendizaje en matemáticas

Articulo de Vida sana sobre Discalculia, dificultad en el aprendizaje en matemáticas.

Saber mas acerca de Discalculia, dificultad en el aprendizaje en matemáticas

Discalculia, dificultad en el aprendizaje en matemáticas

¿Qué es la discalculia?

¿Por qué se produce la discalculia?

¿Qué es la discalculia?

Tiene por nombre de este modo a la complejidad para efectuar cálculos matemáticos y se acostumbra a aplicar en entornos académicos, en casos de pequeños o bien pequeñas en edad escolar que muestran evidentes contrariedades para las matemáticas en general: no pueden o bien les cuesta mucho efectuar operaciones fáciles con números, como restas, sumas, multiplicaciones… les resulta muy complicado el cálculo mental, si bien sea con fáciles cifras, y acostumbran a verse inútiles de comprender los planteamientos de problemas a solucionar que les ponen en clase.

La discalculia puede comenzar a verse sobre los 4 años, cuando en el segundo ciclo de educación infantil comienzan las educadoras a instruir sumas y restas al estudiantado, y ser más evidente desde primaria, donde las demandas en las asignaturas matemáticas requieren una madurez a nivel cognitivo que los pequeños con estas contrariedades no tienen.

Los pequeños con esta complejidad manifiestan un nivel en matemáticas bastante bajo la media de su edad. Otras asignaturas pueden verse perjudicadas asimismo, como otras áreas generalmente del desarrollo psicoafectivo del pequeño.

¿Por qué razón se genera la discalculia?

No hay un único factor desencadenante de la discalculia. Acerquémonos a posibles causas.

Causas físicas

Desde un estudio pormenorizado efectuado por profesionales (las neurociencias han hecho muchos avances en este sentido), debemos ver hasta qué punto hay una afectación neurológica esencial en el sistema inquieto del pequeño que le impide conseguir la fluidez de sinapsis (conexiones neuronales) que requieren los cálculos matemáticos.

La discalculia puede ser una secuela evidente desde un parto traumático o bien un golpe en la cabeza por accidente. Hay unos “caminos” cerebrales que quedan dañados y que dan los síntomas ya antes descritos.

La capacitación del cerebro se efectúa en los primeros años y por capas. Sobre los un par de años, comienza a tener funcionalidad el córtex cerebral, la última capa, y es el responsable de los argumentos, el lenguaje verbal y el lenguaje matemático. Desde esta edad se marcha desarrollando poco a poco más este tercer nivel, que puede llegar a permitir al hombre altos niveles de abstracción.

La capacidad para poder efectuar cálculos mentales, operar con números, comprender planteamientos de inconvenientes, imaginar posibles soluciones… está en esta capa última del cerebro. Al trabajarse esta habilidad, ya de pequeños, se comienzan a crear unos surcos o bien caminos neuronales que quedasen para siempre grabados y determinan las formas de razonar y comprender el planeta.

Además de estas “heridas” a las que me he referido, que puede haber en el cerebro, podemos contemplar la posibilidad de que estos caminos no existan sencillamente por la carencia de empleo. Son casos en los que no se ha trabajado desde un comienzo con los pequeños estos aspectos (acostumbran a ser pequeños poco estimulados normalmente).

Causas sensibles

La discalculia asimismo puede tener su origen en causas sensibles. Son casos en los que vemos que el pequeño presenta las contrariedades ya antes señaladas mas no vemos supuestamente ninguna causa física evidente.

Examinemos un tanto su ambiente y veamos si:

Hay demasiada presión por la parte de los progenitores o bien de los maestros, educadores.
Hay algún evento puntual que ha desequilibrado al pequeño.
Es un pequeño muy exigente consigo.
Es un pequeño que se reprime ante el resto, se bloquea en clase.

En estos casos, la falta de seguridad mengua la capacidad cognitiva y puede llevar a bloqueos notables. Cuando en clase el pequeño se siente juzgado, sus capacidades no fluyen. Es simple que se confunda con los cálculos normalmente.

En otras asignaturas esta complejidad puede quedar más disimulada, mas en matemáticas acostumbra a haber un requerimiento de contestaciones específicas y de forma veloz que a estos pequeños inseguros les cuesta dar.

¿Qué podemos hacer?

La detección precoz de la discalculia es fundamental. Si vemos que nuestro hijo o bien pupilo tiene contrariedades esenciales cuando se están introduciendo en su escolaridad los pequeños cálculos matemáticos, observemos y pongámonos en contacto con profesionales que nos asistan a situar bien el inconveniente y a efectuar el abordaje o bien tratamiento conveniente.

Un trabajo terapéutico conveniente deja, merced a la plasticidad cerebral, notables mejoras. En todo caso, el pequeño tiene que sentirse apoyado, comprendido y valorado. Hagámosle ver sus puntos fuertes y facilitémosle su desarrollo integral.