El verano, el corazón y las emociones

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El verano, el corazón y las emociones

¿A qué órganos afecta el verano?

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¿A qué órganos afecta el verano?

El factor fuego, en la teoría china de los 5 elementos caracteriza al verano, dando la energía que rige al corazón y al intestino delgado.

El corazón guarda relación con la capacidad de regir, comprender y ver meridianamente, y de servir compasivamente. El intestino delgado recibe, asimila y asimila los comestibles.

Las 2 funciones del fuego, circulación y calentamiento, son esenciales para la armonía global del cuerpo. El fuego es el factor más yang, la energía más activa, y masculina. El fuego es el sol: energía, calidez y vitalidad.

El verano, el corazón y las emociones

Relación fuego-agua/masculino-femenino: Lo masculino está regido por el fuego (yang), al tiempo que lo femenino está regido por el agua (yin), todos contenemos los dos principios. Lo masculino/fuego estimula a lo femenino agua/sentimientos, que conduce esto como amor a través del corazón. El amor es una armonía de cuerpo-psique-espíritu.
La intuición o bien sexto sentido: en el sistema chino se considera un atributo del elemento fuego, puesto que semeja ser un sentido del corazón. Nuestros corazones conocen la verdad. Precisamos localizar el equilibrio entre el corazón y la psique. Ninguno de ellos debería tomar el control si deseamos probar una buena salud: el corazón y la psique tienen que trabajar de forma conjunta. Hay que sostener la psique abierta y clara y rememorar las palabras de Parmahansa Yogananda: “Escucha, escucha la canción de tu corazón”.

Dieta de Verano

En verano acostumbran a subir las temperaturas y estamos más activos. Precisamos una dieta que nos sostenga frescos y ligeros. Una dieta ideal incluiría primordialmente frutas y verduras frescas, cultivadas orgánicamente (sin pesticidas ni otros productos químicos), muchos jugos y agua, ensaladas nutritivas de múltiples colores y ciertos cereales integrales.

Una alimentación apropiada es esencial para el mantenimiento de un corazón saludable y para otorgar comburente y calor al cuerpo. Por lo tanto, hay que suprimir de la dieta comestibles refinados, té café, alcohol y tabaco, y reducir la ingesta de grasas de origen animal, singularmente carnes rojas, productos de granja y otros comestibles grasos, la sal y el azúcar.

La relación de la dieta con las enfermedades cardiacas y vasculares es definitiva. La aterosclerosis, o bien depósito de grasas en los vasos sanguíneos, se ha relacionado con una dieta de alto contenido en colesterol y grasas de origen animal.

Si bien hay que saber que es preciso tiempo, compromiso y mucho trabajo para terminar con enfermedades que han tardado años en desarrollarse.

Plantas medicinales indicadas

Las yerbas indicadas para fortalecer el factor fuego son:

El pimentón: tónico estimulante natural, calorífico mas no irritante. Actúa como limpiador de la sangre acrecentando la producción de orina o bien sudor.
La raíz de jenjibre: una o bien 2 tazas al día tiene efectos ventajosos sobre la circulación y la temperatura anatómico.
Ajo: robustece y limpia la sangre.
Flor de trébol rojo: como té, limpia la sangre.

Ciertas yerbas concretas para el intestino delgado son:

Raíz de consuelda, raíz de regaliz, semillas de hinojo y semillas de anís.

Ciertas yerbas para el corazón son:

Bayas de espino albar: potente tónico del corazón.
Raíz de Ginseng: rejuvenecedor y tónico general, que fortalece asimismo el corazón.
Borraja:hojas y flores fortalecen el corazón, marcha más a nivel sensible.

Ejercicio, la mejor terapia

El ejercicio es un factor esencial para el mantenimiento del corazón y del sistema circulatorio y, de todo el cuerpo. Asimismo ayuda a robustecer el factor fuego.

El ejercicio aeróbico regular estimula la respiración profunda, la circulación, y la sudoración que ayuda a suprimir toxinas de la sangre mediante la piel.

El ejercicio calmará el cansancio y la carencia de energía, aparte de reducir el exceso de peso. Ayuda a reducir la tensión, da bienestar, mejora la flexibilidad y reduce la rigidez de músculos y articulaciones. Correr, nadar, montar en bici, entre otros muchos deportes robustecen y mejoran la resistencia y la capacidad pulmonar, dando mayor coraje para enfrentarse a la vida.

El verano es el instante de recargar con la luz solar las baterías del cuerpo. Hay que intentar preservar el equilibrio entre fuego y agua, y sostener un cuerpo saludable haciendo mucho ejercicio.

El verano es el instante del desarrollo y del llegar a ser, de alimentarnos de forma continua y crear armonía; el factor fuego rige el verano y el verano es todo corazón.

Bibliografía: Elson M. Haas. La Salud y las Estaciones. Ed. EDAF, sociedad limitada dos mil diez.