Como se puede conseguir una buena convivencia escolar

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Como se puede conseguir una buena convivencia escolar

Convivencia escolar, ¿es posible?

¿Siempre se han peleado los niños en el colegio?

Convivencia escolar, ¿es posible?

En todas y cada una de las escuelas hay convivencia mas no en todas y cada una es la más conveniente. Lo que debemos buscar y fomentar es buen plan de convivencia escolar en tanto que el instituto en la niñez es esencial para el desarrollo.

En él ponemos de manifiesto nuestro carácter y nuestra capacidad de relacionarnos y de solucionar inconvenientes por nosotros mismos. La escuela es donde se hace el aprendizaje y la preparación para la vida, se efectúan actividades que implican las emociones, los sentimientos, la educación recibida en casa, y los límites que marcan los progenitores, la corporación y los profesores.

¿Siempre y en todo momento se han peleado los pequeños en el instituto?

Sí, cuando hay diferencias es muy normal que haya discusiones entre ellos mas hay que enseñarles que no es preciso recurrir a la violencia para solventarlos, sino más bien con el dialogo, exponer la situación, negociar y aprender que no siempre y en todo momento se gana. Que aprendan a solucionar el enfrentamiento sin herir a absolutamente nadie. Un plan de convivencia escolar va a ayudar a solucionar exitosamente estos inconvenientes.

El líder o bien atacante ¿es asimismo, por su parte, víctima?

El atacante reproduce lo aprendido, si fue víctima directa o bien indirecta del maltrato, ejercitará la violencia si cuenta con la suficiente motivación. Es posible que busque sentirse magnífico, respetado, desee llamar la atención, etcétera En general tiene baja autoestima, poca tolerancia a la frustración y/o un enorme vacío que no sabe de qué manera completar.

Víctima y baja autoestima

La victima tiene una baja autoestima y su forma de contestar es de forma pasiva. Puede pensar que no cuenta con los recursos suficientes para defenderse, poner un alto a la agresión y hablarlo con sus progenitores. De manera inconsciente puede opinar que merece ser tratado de este modo, puede sentirse solo o bien tal vez ha estado muy protegido y no sabe de qué forma manejarse en un medio beligerante.

¿De qué manera lograr que todos se sientan una parte de un mismo equipo?

Todos tenemos fortalezas y debilidades, es de máxima importancia conocer como es la fortaleza de cada chaval para echar mano de estas para la integración del equipo. Por servirnos de un ejemplo, si hay una pequeña que le agrada mucho saltar y es buena para ello mas le da lástima, y hay otro que es más veloz, entonces en un juego, se les asignaran labores detallas conforme a sus capacidades, motivándolos, un trabajo de integración. El maestro ha de estar al pendiente de que se hagan las cosas como lo quiere para cumplir la meta y que absolutamente nadie sea excluido.

Buscar la participación de todos, a través de un buen plan de convivencia escolar, destacando sus virtudes y reduciendo sus defectos. Cuando llamen la atención se aconseja que sea en solitario, para no abochornar y producir enfurezco. Tratarlos de forma igualitaria, que no haya preferencias.

Es conveniente que les dediquen un tanto de atención a aquellos pequeños considerados “problema” puesto que atrás de la agresión o bien de la pasividad puede haber otro género de problemática en el ambiente familiar o bien en sus emociones, puede estar pasando por algún duelo o bien situación bastante difícil.

Organizar un buen plan de convivencia escolar es esencial para lograr que los pequeños tengan unas relaciones sanas y sin inconvenientes.

¿Y los progenitores?

Verdaderamente la mayor responsabilidad del comportamiento de los pequeños es de los progenitores. Ellos son los primordiales educadores y tienen la obligación de inculcarles reglas, moral, ética y valores, cuidando el medio en el que se desenvuelven, puesto que vivimos inmersos en una cultura y no solamente nos influye el ambiende de casa sino más bien asimismo los medios y entretenimiento.

Lo aconsejable es que charlen con sus hijos, que los observen en su comportamiento diario, que se hagan presentes para sus pequeños (dedicándoles tiempo), que les transmitan que deben respetar una autoridad y que, si bien fallen, se les proseguirá amando.

Esto les robustecerá su autoestima y su nivel de responsabilidad ante sus actos. Remarcarles lo que si está tolerado y lo que no, en tanto que si bien sean pequeñísimos si entienden lo que se les enseña.

Los progenitores asimismo deben implicarse y participar en el plan de convivencia escolar que plantee el centro.